
Habrá amplia cooperación bilateral entre México y Estados Unidos ¿Podría ser esto una mirada esperanzadora a favor de los migrantes de México y el mundo?
La migración siempre ha constituido una de las temáticas de mayor interés en el mundo, determinada por los desbalances entre las variables económicas y demográficas de los países que se encuentran condicionadas por el desarrollo y su inclusión económica.
La falta de un sistema de coordinación y estrategia migratoria basada en los derechos humanos está creando una crisis de derechos para los migrantes, tanto en las fronteras como en los países de tránsito y destino.
“Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos”
El panorama irregular de los derechos humanos de los migrantes, se ha venido marcando por un incremento sustancial de las situaciones de riesgo que enfrentan las personas que migran, haciéndolas más vulnerables, reportó La Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
Por ello, los gobiernos de México y Estados Unidos acordaron una serie de medidas para reducir los flujos migratorios irregulares durante la pandemia, aunque las medidas impuestas para frenar el contagio del virus han limitado la movilidad.
El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, y el asesor de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, acordaron diseñar conjuntamente estrategias regionales migratorias para que los flujos sean ordenados, seguros y regulares.
En una reunión virtual, el canciller Ebrard expresó la importancia de la cooperación con los países del Triángulo norte de Centroamérica y señaló los avances del Plan de Desarrollo Integral y las futuras acciones para promover, garantizar y proteger los derechos de los migrantes. – eleconomista.com.mx
“La visión centrada en la protección de los derechos humanos de las personas migrantes y refugiadas, así como en una respuesta regional centrada en el desarrollo económico es la base de un plan migratorio sobre el cual se debe seguir trabajando en el corto plazo”

México y Estados Unidos
Acciones estratégicas integrales a corto y mediano plazo para promover, garantizar y proteger los derechos humanos de los migrantes .
En el marco de las estructuras institucionales de las Naciones Unidas, se hace necesario asumir un compromiso sólido con un enfoque basado en los derechos humanos de los migrantes, así como adoptar una visión clara sobre cómo deben aplicarse dichas estrategias.
La administración de ambas partes, en su reciente reunión virtual (diciembre 2020), han reconocido que la migración irregular desde los países del Triángulo Norte de América Central no se puede abordar de manera efectiva, sí las soluciones solo se enfocan en la frontera sur.
La mejor respuesta radica en abordar las causas fundamentales que empujan a las personas desesperadas a huir de sus hogares en primer lugar: violencia e inseguridad, falta de oportunidades económicas y gobernabilidad corrupta.
Por lo que, se plantean nuevas acciones estratégicas, como:
1) Replantear la condición de asilo
Restablecer el asilo de la frontera en México y Estados Unidos, pero con procesos eficientes para asegurar decisiones justas y puntuales.
No hay duda de que los flujos migratorios de Centroamérica son mixtos y están compuestos por migrantes que huyen de la violencia y, otros, que buscan mejores oportunidades socioeconómicas.
A la fecha, los gobiernos de México y Estados Unidos han estado abordando dicho problema con la implementación de los (MPP, por sus siglas en inglés), “Protocolos de Protección al Migrante” también conocido como “Quédate en México”
Es un programa del gobierno de los EE.UU. iniciado en enero del 2019. Este programa invita a las personas con casos pendientes ante juzgados migratorios estadounidenses, a permanecer en México el tiempo que dure el caso del asilo.
2) Fortalecer las instituciones migratorias
Tanto México como Estados Unidos buscarán el beneficio priorizando los planes de reintegración previos a la partida de los deportados. Todo este trabajo se hará mediante agencias gubernamentales y organizaciones internacionales para conectar a los deportados con programas de reintegración y ayuda.
El ICE (Oficina de Control de Aduanas) y el INM (Instituto Nacional de Migración) pueden ayudar a algunos migrantes deportados a insertarse en su país de origen e incrementar las oportunidades de subsistencia; así como, la ORR (Oficina de Reasentamiento de Refugiados) para atender las necesidades inmediatas de las familias y menores, debido a las condiciones insalubres actuales para alojar a los grupos más vulnerables. – fuente migrationpolicy.org

3) Desarrollar un enfoque regional para enfrentar las redes de contrabando
Reformar la protección de la frontera entre México y Estados Unidos con el fin de que ésta sea más eficaz y humana. La atención prioritaria debe enfocarse en grupos de contrabando que realicen prácticas predatorias o aquellos que estén vinculados con grupos de crimen organizados y, que ponen en peligro la vida de los migrantes.
Esto debe incluir:
- Reconstrucción de sistemas de protección humanitaria
- Expansión de los sistemas de protección dentro del país
- Apoyo total al sistema de asilo mexicano e iniciativas de reasentamiento para evitar los abusos
- Fortalecimiento de la reinserción de refugiados en Estados Unidos
- Garantizar la vigilancia fronteriza transparente y basada en reglas
- Desarrollo de un mapeo sofisticado que permita ir no sólo tras traficantes sino tas las operaciones logísticas y financieras que apoyan a estos grupos de contrabando, así como los vínculos a negocios legales, tales como: compañías de autobuses y hoteles
4) Crear vías legales para la migración
Ampliar las oportunidades de movimientos migratorios legales, mediante el incremento de accesibilidad a permisos de trabajo estacionales para los ciudadanos de los países de Centroamérica con mayores presiones migratorias.
5) Invertir más en el desarrollo y seguridad pública
Invertir en el desarrollo económico e institucional en Centroamérica con el propósito de mitigar las fuerzas que impulsan la emigración.
"Para ir construyendo hacia una migración más segura, ordenada y legal, México y Estados Unidos deberán mejorar la colaboración en toda la región y, diseñar e implementar un enfoque regional multifacético para este fenómeno regional perdurable”.
Esperemos que esta agenda migratoria llena de nuevos enfoques a corto y mediano plazo, sea positiva para ambas naciones, donde haya una urgente necesidad de ir más allá de las medidas de control migratorio y se comiencen a accionar las estrategias que permitan que ambos países realicen una transición migratoria legal dentro de la región para el beneficio de todos.